*¿Frío? ¿Calor? Tipos de colchones y la temperatura ideal:
Está claro que no hay mejor temperatura que la que uno pueda soportar o bien en la que se encuentre más a gusto. Como también es obvio que, según los materiales de cada colchón, pasaremos más frío o calor a lo largo de la noche. Si bien la superficie de contacto influye muchísimo, también debemos estar atentos al tipo de construcción interna y materiales, pues no es lo mismo contar con "Cloud Foam" y tejidos naturales, por poner un ejemplo, que prescindir de él y optar por uno con sintéticos.
Aún así, además de usar todo tipo de técnicas de fabricación y diseño, partiremos de dos supuestos muy simples.
-Duro: Como ya hemos dicho en otro de los apartados, la rigidez de la superficie repercute de un modo directo en la temperatura corporal mientras dormimos. A menor contacto de ésta con nuestro cuerpo, las corrientes de aire circularán bajo nosotros, con lo cual un colchón más duro será lo más conveniente. Lo ideal es hacerse con cualquiera de nuestros colchones ya que cualquiera de los que tenemos, incluso el más barato que es el Zaire, cuenta con un sistema que favorece el paso del aire, aunque nuestro consejo es aunarlo con un colchón de muelles, como nuestro Golden Dreams.
Los tejidos naturales son mucho más frescos si vivimos en un ambiente con mucho calor.
-Blando: Cualquier material viscoelástico, o al menos el que más se pegue a nosotros como también los de látex y espuma, será el idóneo para dormir cuando lo que ocurre es que vivimos en un ambiente muy frío.
Seamos realistas, no es la solución a nuestros calores veraniegos, pero si escogemos un colchón en condiciones eso puede influir en la variación de algunos grados de temperatura.